Presentación del libro "Hijos del Gran Arquitecto", de la mano de su autor.

EL AUTOR

Iñaki Zuloaga (Eibar 1956) Economista, empresario, político, masón. Siempre sintió la llamada de la literatura desde la juventud en la que escribió poesía y relatos breves. Inmerso desde 1980 en una incansable actividad empresarial, fue director financiero de una empresa multinacional, antes de crear su propia empresa de máquinas herramienta, Teknimak S.A., de la que ha sido gerente durante treinta años.

Comprometido con el reforzamiento de la sociedad civil, se inició en la masonería, a la que considera una verdadera escuela de ciudadanía, en la Respetable Logia Manuel Iradier nº 26 de Vitoria-Gasteiz, en 1994. Posteriormente fue  fundador de la Respetable Logia Altuna nº 52 en Donostia-San Sebastián en 2001 y desde la que recientemente, ha ayudado a impulsar la creación de la Logia Xavier Mina en Iruña - Pamplona. En la década de los noventa fue Gran Orador del Gran Consejo Simbólico de la Gran Logia Simbólica Española.

Su incansable actividad política, económica y masónica, se vio truncada por un infarto de miocardio, que le sobrevino durante una reunión de trabajo en Tel Aviv (Israel) el día de San José de 2012 y que le ha mantenido apartado de sus obligaciones, dándole la oportunidad de llevar a término su deseo de iniciarse en el camino de la literatura, con su primera novela publicada “Hijos del Gran Arquitecto”.

Capitán de Yate, la navegación ha sido siempre una de sus grandes pasiones. Viajero incansable ha recorrido los cinco continentes acumulando experiencias que piensa plasmar en las próximas novelas de su personaje Manex Lamark.

LA NOVELA

Hijos del Gran Arquitecto, de Iñaki Zuloaga, no es una novela de intriga, ni de aventuras, ni de viajes, ni de espadachines, ni de navegantes, aunque tiene un poco de todas ellas, en un claro homenaje del autor a todos los géneros con los que disfrutó a lo largo de su vida de lector.

El objetivo central de la novela, es que el lector pase un buen rato leyendo las peripecias aventureras del protagonista Manex Lamark que le llevarán desde París a La Habana, pasando por San Sebastián y Tolosa en el curso de una arriesgada misión para llevar a los independentistas norteamericanos unos misteriosos documentos fundamentales para el curso de la guerra.

Más allá de la trama aventurera la novela se centra también en otro objetivo como es el de dirigir la mirada hacía algo fundamental de nuestras sociedades. Las libertades públicas. ¿Dónde nació la libertad de la que hoy disfrutamos? ¿Quiénes la hicieron posible? ¿Por qué ocurrieron los hechos que determinaron nuestro presente? Nada ocurre porque sí. Detrás de estos hechos extraordinarios que están en el origen de nuestros actuales sistemas de gobierno, se esconden extraordinarios personajes como Benjamín Franklin e inesperados sucesos que acabaron por desembocar en la independencia de los Estados Unidos, que ha determinado de manera imprescindible el futuro de nuestras sociedades. Nacen allí los derechos individuales y las libertades públicas reconocidas en la Constitución. Nace allí la primera Declaración de los derechos del hombre, nace la Ley como eje fundamental de la seguridad, base de una libertad sólidamente formulada.

Trata también esta novela de situarnos en otros ejes de reflexiones relacionadas con lo ya expuesto. ¿Qué futuro espera a nuestros hijos si olvidamos nuestro pasado?  Hoy que a golpe de cotidianidad casi hemos olvidado el significado de estas palabras, quizás no somos conscientes de que quien no lucha por lo que tiene lo  acabará perdiendo con absoluta certeza, a manos de las fuerzas seculares que siempre trabajaron para sojuzgar al ser humano. Cuando se olvida el pasado se pone en  riesgo el futuro, una reflexión que no por manida deja de ser fundamental para definir el devenir de nuestras sociedades que a la postre es el nuestro.

Esta ardua reflexión sobre estos apasionantes temas, la ha intentado envolver el autor en una trama  ágil y aventurera, casi cinematográfica, llena de emociones y de sentimientos.